Efectos que tiene sobre la piel el consumo de alcohol
Cualquier sustancia tóxica que consumamos, sobre todo cuando debido a una adicción se produce un consumo constante y excesivo, va a tener una repercusión en todo nuestro cuerpo, traduciéndose en unas manifestaciones que, dependiendo del órgano causarán, o no, una manifestación visible o detectable.
Sabemos, por ejemplo, que el alcoholismo va a producir daño hepático, sin embargo ese daño no va a ser detectable inicialmente sino cuando el hígado ya esté francamente deteriorado. Por lo tanto, en el alcoholismo en sus fases iniciales, o cuando el consumo de alcohol es moderado, resulta mucho más complicado identificar un rastro visible del consumo de bebidas alcohólicas.
Los signos más claros de problemas de salud derivados del alcoholismo se van a empezar a notar en la piel debido a la afectación del hígado y del páncreas, pero en las fases iniciales o cuando el consumo se produce con pocos excesos, ¿no se puede detectar que la adicción a la bebida ya empieza a causar daño? A continuación vamos a mencionar esos rasgos que pueden ser más fácilmente detectables.
- La piel aparecerá más apagada y deshidratada, formándose con más facilidad arrugas o quedando flácida.
- El alcoholismo puede conducir a la aparición de dermatitis seborreica o a un empeoramiento del estado de la psoriasis en pacientes que la padezcan.
- Debido a desequilibrios hormonales que se pueden producir por el consumo de alcohol nos podemos encontrar con personas que tendrán acné.
- También puede crecer el bello corporal en zonas donde las mujeres no suelen tenerlo.
Cuando el alcoholismo ha avanzado y se mantiene durante años, los signos en la piel pueden ser mucho más marcados y evidentes:
- Cuando el hígado está dañado se puede producir ictericia lo que deja la piel con pigmentación de color amarillenta.
- Otro rasgo distintivo es que las palmas de las manos pueden aparecer más pigmentadas con un color rojizo.
- Como las bebidas alcohólicas tienen un efecto vasodilatador se puede producir una exacerbación de la rosácea que previamente padeciese quien es un adicto.
- Debido al daño orgánico y a la deshidratación pueden aparecer signos prematuros de vejez, es decir, arrugas más marcadas.
- El alcohol también puede ser el desencadenante de un empeoramiento de eccemas debido a la alteración que causa en la flora intestinal.
Superar una adicción al alcohol, por lo tanto, se va a traducir en una apariencia más saludable pues nuestra piel empezará a reflejar que nuestra salud está mejorando.